Otro de nuestros tratamientos más exquisitos de estética facial se desarrolla mediante la técnica de hilos tensores.
Estos hilos poseen unas pequeñas espículas que se enganchan en el tejido celular subcutáneo, es decir, debajo de la piel, en la grasa, y traccionan desde ahí el tejido haciendo el efecto lifting.
Este procedimiento es ideal para la mujer entre los 40 y 50 años que comienza a ver una ligera caída de la piel del rostro, además puede asociarse a rellenos con ácido hialurónico, a mesoterapia facial con vitaminas y a plasma rico en plaquetas.
Los hilos de polidioxanona se insertan en la dermis, generando una fibrosis a su alrededor, induciendo el autolifting biológico, ya que de forma espontánea, la piel va a generar sus propios hilos naturales de colágeno, siendo un proceso natural y no agresivo para el cuerpo.
Durante la primera semana se observará un ‘efecto lifting’, como consecuencia del edema que desaparecerá en unos días. Pasadas tres semanas, se comenzarán a notar los resultados, con una mejora progresiva hasta el estado óptimo conseguido al tercer mes de tratamiento.
La duración del tratamiento es de 12 a 18 meses, en función del tipo de piel, edad, el grado de descolgamiento y la respuesta individual de cada paciente.
Hoy en día, resulta ser el mejor tratamiento para estimular el rejuvenecimiento de la piel, consiguiendo una mayor vitalidad y notable elasticidad.
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